La caballa es un pescado azul caracterizado por el color verdoso de sus escamas y manchas más oscuras. Durante el inverno, estos peces habitan en las profundidades, mientras que en primavera suben a la superficie a alimentarse, época durante la cual tiene lugar su temporada de pesca.
En Frinsa, la caballa en conserva se elabora a partir de ejemplares, exclusivamente seleccionados, procedente de las costas atlánticas de la Península Ibérica. Tras su llegada a fábrica, los filetes de caballa se someten a proceso de cocción y limpieza manual, para eliminar la piel y las espinas del pescado. Posteriormente, se enlatan a mano y añade una cobertura a base de aceite de oliva virgen extra (28%) que refuerza las propiedades y el sabor de la conserva.