Queso de cabra elaborado con leche de cabra pasteurizada, de pasta prensada, de una textura cerrada (sin ojos en la pasta), conteniendo un 36% de materia grasa.
Se somete a un proceso de maduración media en cava entre uno y dos meses y se recomienda su consumo antes del año.
Su sabor es suave con aroma muy desarrollado en el paladar, con un punto de acidez característico en los quesos de cabra, carece de conservantes, por lo que es un producto natural.
La Sierra de Sevil, denro del Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara, es cobijo de multitud de cabañas de ganado caprino, productor de una leche de calidad, siendo esto el germen de la fabricación de queso artesanal y origen de lo que posteriormente se ha transformado en Quesos de Radiquero.
Se elaboran cuatro variedades: Dos de ellas de pasta blanda, el Río Vero de coagulación láctica y Los Meleses de moho blanco; dos de pasta prensada Sierra Sevil de leche pasteurizada y San Pelegrín semicurado de leche cruda con 6 meses de maduración. Además se elabora un exquisito requesón, queso fresco y las cremas.
La fabricación comenzó en los años setenta. Desde el principio se han seguido unos principios: la utilización de materia prima de alta calidad, el seguimiento de un proceso completamente artesanal, pero tratado con alta tecnología higiénico-sanitaria, y exquisita profesionalidad en la elaboración.